14 de julio de 2007

Los Dos Mundos.

Cuando a los demás les gusta, a mi no. Ende, cuando a mi me gusta, a los demás no. Eso es lo que espero que pase. Para seguir la logica, vio.
Che puli, reaparece, te perdonamos lo que sea que hayas hecho. o echo.



Los Dos Mundos.
De día, él, era esteban diaz.
De noche.. él era Esteban Díaz.
De día, manifestaba todo lo que pensaba.
de noche, pensaba si lo que manifestaba tenía sentido.
De día, el era un sujeto extravagante, conciente de serlo, fanático de los Guns And Roses que tarareaba Paradise City a cada momento.
De noche, el rogaba por ser un hombre común, de que no lo asaltaran nuevas pesadillas respecto a sí mismo, de que no hubieran nuevas dudas sobre si mismo.
De día, era querido y acompañado por sus amigos, de noche, un sujeto solitario, que si se lo encontraban caminando por el barrio a las tres de la madrugada, no reconocería a nadie. Así era la vida de esteban diaz y Esteban Díaz.
Recuerdo una tarde, cuando le pregunté si no quería venir a mi casa esa noche, me respondió, con total seriedad: "No, de noche me pongo absurdo, insoportable, me saco todas mis mascaras, y soy solamente un hombrecito. No quiero que
vean eso" Esteban, siempre era así con nosotros. Cada cosa que decía o hacía, parecía estar acompañada de magia, de una mística. Era un gran mentiroso, debo decirlo. Lo que decía, era tan convincente, y tan profundo, que era imposible no creerlo, aunque estuviera diciendo que El che guevara seguía vivo. Con la gente que no conocía o debo decir, de la que no había escuchado hablar (no se porqué nunca pude sorprenderlo con nada, siempre sabía de las personas mas que nosotros) era cerrado, y si en una primera impresión le caía mal, era destructivo.
Cualquier cosa que esa persona dijera, el se la contradecía, y debo decir, que una sola vez lo ví salir mal parado de una discusión. Recuerdo una vez, cuando conocimos a un sujeto llamado Aldo, cuyo padre era militar, y él también simulaba serlo.
Tenía un bolso camuflado con distintas insignias militares, cuando Esteban vió eso, resopló fuerte, el destestaba a los milicos. En determinado momento, ibamos los tres caminando por un pasillo, y Aldo le preguntó porque era tan callado. Esteban, con su peor cara de asco, le dijo "porque tengo miedo de que vengan los militares, caiga en un CDC, me lleven a una celda inhumana, me saquen solamente para ponerme electricidad en las pelotas, me violen mentalmente, hasta no saber como me llamo, ser simplemente un número, y, si tengo suerte, que me maten"
Así era cuando algo no le gustaba. Picante, Ironico. Aldo se quedó callado. Recuerdo una tarde, cuando yo me encontraba triste, y le dije a Esteban que necesitaba pedirle un consejo. " A las seis en mi casa, pero traete vos los vinos". No maximizaba nada hasta que no necesitaba hacerlo.El era amante del vino. (la otra bebida que lo vi tomar ademas del vino, era, generalmente, ginebra) recuerdo una vez que me dijo lo que el pensabadel vino: " es una bebida oscura y ambigua. Tiene la cualidad de dejarse saborear, uno puede hablarle al vino, mientras va pasando por la garganta, le cuenta sus miedos, sus mejores chistes, y también, sus peores temores. Algo parecido dijo un tal Giardinelli. Tambien tiene la virtud de soltar la lengua. Eso que le contamos al vino mientras va pasando por la garganta, luego se lo contamos a nuestra compañia, y si estamos solos, lo escribimos. Eso por virtud.
Su defecto, el que mas temo, es la resaca de la mañana".Solo cuando había tomado era simpatico, o gracioso. No dije borracho, dije que habia tomado. Así también, para escuchar o
aconsejar a una persona (y que eso no le fuera aburrido) nececitaba un vaso o dos de vino en la sangre, no podía soltar lo que pensaba, no podía aconsejar ni dar un punto de vida concreto sobre una persona, si se encontraba deliberadamente sobrio.
Pero para contar sus miedos, sus amores, o sus problemas, debía estar completamente ebrio, cuando sabía que al día siguente vendría lo que temia. La resaca.Una vez, mientras discutiamos, le dije que realmente el no me conocía. Su cara cambió de la alegría (nada le gustaba mas que discutir, o debo decir, que despues de tomar, su otra cosa favorita era discutir) a ese rostro que tantos sentimientos me despertaba, tantas dudas, era tan ambiguo cuando pensaba. En ese momento empezó adarme una descripción completa de quien creía ser yo. Y después, de quien realmente era. Me quedé estupefacto. Nadie, nisiquiera yo mismo, podía decir quien era. Pero el sí lo sabía. O me había convencido. Se que por la forma de mirar y de hablar de las personas el podía guiarse sobre quien era el otro. Me lo dijo una vez, pues, invariablemente, solo sabiamos de él, las cosas que nos decía. El resto eran suposisiones, que el se encarga de derribar. Hoy lo recuerdo casi como un mito. No se si realmente era tan como lo describo. Una vez me contó que estaba enamorado. Lo recuerdo claramente... estabamos sentados en su habitación, tomando mate y escuchando, invariablemente, los Guns And Roses. Tenía la cualidad de poder sorprendernos todo el tiempo, desde decir una cosa, y a continuación, otra que contradijera completamente lo anterior. O confesar algo sin estar ebrio, aunque eso sucedió solo esta vez. O, con toda la seriedad del mundo, hacernos una broma pesada... Su risa era tan ambigua.. se reía, tosía, pero era una risa fuerte, estrepitosa, conciente de su "risedad"... parecía que los planetas se alinearan, que aparecieran las manos de Peron, que reviviera el Che guevara, o que Esteban se ríera.
Esas cosas que nunca suceden. Volviendo a su confesión sobria. Estabamos cantando Yesterdays y de repente, me miró y puso esa cara seria como una piedra, casi que daba miedo.
Y después, cuando yo me atormenté, pensando que había echo algo malo, se rió.Yo lo insulté, le pregunté si era boludo o estaba borracho. Su respuesta volvió a dejarme helado." Mi vieja no es ninguna puta, boludos somos todos por vivir, y borracho, no estoy, o no concientemente.
Pero te quiero contar algo breve, que me tiene inquieto". Su breve se prolongó una hora y media. Tenía esa facilidad para describir las
cosas, que todo nos pareciera tan hermoso, aunque estuviera hablando de Mónica, una preceptora gorda y horrible que compartimos en el secundario.
Me dijo que se llamaba Gabriela. Que el nombre en sí no le gustaba. Pero que tenía unos ojos hermosos. Y que sobretodo, lo entendía. Pero no mucho. Para que no se acostumbre. Después de decirme eso, se cortó en seco. Subió el volúmen de la música al maximo, durante media hora, que estuvo como metido dentro de si mismo, los ojos se le habían apagado. Levantó la vista, buscó las sillas se sentó en el respaldar de una, se encendió un cigarrillo y volvió a caer en ese sopor. El cigarrillo se le consumió entero en la mano, sin que Esteban lo tocara apenas. En ese momento estaba opaco, sin brillo,
como si hubiera dejado de funcionar.
- Vos sabés que no sé si te tendría que haber contado todo esto. Mañana me voy.
- A donde te vas a ir?- lo subestime un poco.
-No se. Ya veremos.. el destino nunca es lo esencial.
Y era verdad, nomás. Al día siguiente no apareció. Ni ninguno de los que siguieron. Hace cuatro años, me pregunté si el de veras existio. Y la verdad, es que no lo sé. Asique si es que existía, hace seis años, cuatro meses y tres días que se fue. Aún lo espero para tomar mate cuando vuelva, como me prometió. O quizás haya perdido mi número de telefono.

2 comentarios:

• ☼§► la SoRCièRe ◄§☼ • ♠ dijo...

De día era Esteban y de noche, Nancy... jajaja.

En fin. Supongo que en el amanecer/atardecer serás quien en realidad sos.

º·.Such a little raven.·º dijo...

...lástima que no me guste el vino ^^~